En el Centro Educativo María Antonia Díaz Hernández, el Día de las Madres se vivió como una verdadera celebración de amor y gratitud. Con sonrisas, aplausos y emociones a flor de piel, estudiantes y docentes rindieron un cálido homenaje a las madres, quienes son el pilar fundamental en la vida y educación de sus hijos. Las voces, danzas y colores llenaron el ambiente, creando un momento inolvidable que reafirmó el valor de la familia y la comunidad educativa como un espacio de unión y cariño.
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